La meta de efectuar un buen calentamiento es lograr que tu cuerpo alcance un nivel perfecto de forma gradual para rendir al límite. Antes de someter a tu organismo a una fuerte exigencia precisas prepararlo apropiadamente, y con un buen calentamiento lograrás los beneficios que te van a ayudar a conseguir un mejor rendimiento:
Aumenta la Temperatura Anatómica
Elevar la temperatura de los músculos es esencial para mejorar tu desempeño antes de correr. Conforme a estudios médicos, la capacidad de los músculos para generar energía y aumentar la velocidad de contracción muscular puede incrementar hasta en un trece por ciento por cada grado centígrado de temperatura que logramos en el calentamiento.
Aumenta la actividad Cardíaca y la Respiración
El calentamiento genera la apertura de muchos sistemas pilíferos que en reposo están inactivos, produciendo el incremento del flujo sanguíneo, aumentando la capacidad pulmonar y fortaleciendo el volumen de la sangre bombeada. De igual modo, al incrementar la captación de oxígeno se activan diferentes fases del metabolismo esenciales para enfrentarse a situaciones de exigencia física. El sistema cardiorespiratorio, por ende, aumenta su actividad dilatando los vasos sanguíneos e incrementando la irrigación pulmonar previniendo las contracturas del diafragma.
Incrementar los Reflejos, la Coordinación y el Equilibrio
Cuando calientas se genera un mayor impulso en todo tu sistema. Sus reflejos aumentan para correr con eficacia y con una técnica adecuada en cada zancada. De igual manera, se activan los sistemas adrenales generando mayor número de endorfinas y neurotransmisores, lo que te provocara una euforia increíble al correr y amar tanto este maravilloso deporte del running.
Incrementa el flujo sanguíneo en tus músculos
A lo largo del calentamiento logras que la sangre llegue a todos y cada uno de los músculos implicados en el calentamiento y los oxigene. Las fibras musculares acrecientan su longitud y su activación neuromuscular para aumentar el desempeño del músculo y eludir las lesiones musculares..
Cuida las articulaciones, tendones y estructuras óseas
Al efectuar un buen calentamiento, las articulaciones se calientan y aumentas la fluidez del líquido sinovial, que es el responsable de resguardar las superficies cartilaginosas. De la misma forma el sistema ligamentoso se comienza a amoldar al movimiento, las estructuras óseas reciben el impacto directo, dejando una mejor amortiguación y dispersión de la tensión al correr. Por tanto, calentar te va a ayudar a prevenir esas molestas lesiones por impacto que pueden surgir al correr.